Las luces brillaban a tu paso
como brillaban mis ojos
al mirarte
como brilla el sol
como brilla el faro en una noche penetrante
Tu silueta húmeda
dibujaba tu masculinidad
masculinidad que me seduce
que me trastorna,
que me transforma..
que eleva mi conciencia
y produce los mejores
instintos en mi inconciencia...
y yo ahí a tu lado
Haciéndome invisible
y tu sin percibirme
sin sentirme
sin verme
sin oírme
Vi tu marcha ágil
alejarse de mí
como se alejaba
aquella brisa de primavera
para no regresar jamás...
Solo un adiós enmudecido
pude pronunciar...
y una lágrima de mis ojos
hiciste brotar
Mi amor de adolescente
lastimado está...
pero han trascurrido
tantos años...
y he regresando
al mismo lugar
solo cerré mis ojos
suspire al no verte más
y olor de tu cuerpo
tu fragancia de
masculinidad...
de mi conciencia
se vino a apoderar
como se apodera
el calor del sol
al día avanzar
Y te sentí...
y te percibí
y nuevamente
mis instintos de inconciencia
volvieron a surgir
y solo un suspiro
me hizo volver en sí.
Te seguía amando por eso
te presentí
y pensé que era mi mente
que quería burlarse de mí...
cuando vi
nuevamente tu silueta
dirigiéndose hacia mí..
y te adivine
en mi cuerpo
y te adiviné en mi sentir...
y supe de inmediato
que hoy venias por mí
Y te amé en silencio
te dije al susurrar
ése “te amo” esperado
que solo tu amor podrá mitigar..
Me sonreíste y solo
pudiste pronunciar
“por fin te encuentro
vida mía”...
“eres tu mi antojo,
y mi verdad..
ntente ignorarte mucho tiempo
y ya ves
fue sufrimiento total
porque solo entre tus brazos
tengo la felicidad"...
Esperanza Ramos Yáñez
