Domingo, 02 de enero de 2011 a las 13:03TU AUSENCIA
Pareciera que los pitos, que la música ensordecedora,
quisieran borrarte de mi mente... de ese ayer tranquilo,
de ese ayer lejano, de ese ayer que solo está,
en las gabetas de mis recuerdos...
recuerdos afloran a mi mente como una realidad inmediata,
siento el olor a polvo que levantan los niños,
jugando en las polvorientas calles de mi pueblo...
siento el olor a comida casera...
siento el bullicio del pueblo por la llegada de un año nuevo,
bullicio contagioso...
aun recuerdo con nostalgia... esos tiempos de mi niñez, en los que saltaba de alegría,
tiempos en los que la ternura y la inocencia...eran solo mi compañía...
retumba en mis oidos todavía esos gritos de alborozo, en el parque, en la calle, todos reiamos...
parecia la primicia de un carnaval...
pero tú...amigo mío... estabas ahi... parado sereno, pensativo y un poco taciturno...
pareciera que tus pensamientos y tu mirada se alejaba de este mi pueblo...
parecia tu mirada un adios irrenunciable... un adios inevitable...
yo te sonrei, franca y abiertamente, como yo solo lo se hacer... logrando arrancarte una leve y sutil sonrisa...
te miré fijamente a esos ojos color de selva...
penetrantes y oscuros ...
y sentí miedo de lo que ví...
era el presagio de tu partida... una mezcla de tristeza y desesperación... y desengaño...
te volví a sonreir y volvistes a mirarme...fijamente...
pero ya no sonreistes mas...
solo un adios quedo en el ambiente sin tú haber musitado una palabra...
sin tu haber emitido un gesto ni un sonido;
te diste media vuelta y te vi caminar seguro y lento... te mire hasta ver perderte entre las sombras,
y comprendí que te marchabas y que jamás regresarías... que solo en mis recuerdos te quedarías....
que mis lagrimas nunca mas volverias a ver, y que a mi tristeza no acompañarías...
la música, los pitos, el bullicio, mi gente, la pólvora me hicieron volver a la realidad,
solo alegría, se respiraba en el ambiente,
te busque en cada rostro, te busque en cada par de ojos, que se cruzaban en mi camino...
te busque en cada sombra, aun en la penumbra de esa noche...
sonaban los pitos de manera insistente, anunciando la llegada del un nuevo año,
los gritos ensordecedores... las luces como relampagos que se estrellan en el firmamento, por segundos enceguecian mis ojos... todo era alegría...
pero yo ...te buscaba amigo mío...
me escurri entre la multitud y camine solitaria...
por ese camino polvoriento, por ese sendero intransitable...
y te encontré ahí tendido en el suelo... inerte y frío...
no pude volver a ver tus ojos color de selva, que me hacian ver mis miedos, mis temores, y mis desamores...
no pude volver a ver en tu sonrisa leve y sutil...
aquellas tristezas sufridas, que recordaban, mis angustias... entonces comprendí que ya no te tendría más...
solo lágrimas bajaron de mi ojos... rodando sobre mis mejillas y callendo al vacio infinito del tiempo y luego sobre tu cuerpo...
te lloré amigo mío... como se llorá con el alma... te lloré entre la nostalgia y en la alegría...
porque tu pérdida era mi liberación...
Esperanza Ramos Yañez
Pareciera que los pitos, que la música ensordecedora,
quisieran borrarte de mi mente... de ese ayer tranquilo,
de ese ayer lejano, de ese ayer que solo está,
en las gabetas de mis recuerdos...
recuerdos afloran a mi mente como una realidad inmediata,
siento el olor a polvo que levantan los niños,
jugando en las polvorientas calles de mi pueblo...
siento el olor a comida casera...
siento el bullicio del pueblo por la llegada de un año nuevo,
bullicio contagioso...
aun recuerdo con nostalgia... esos tiempos de mi niñez, en los que saltaba de alegría,
tiempos en los que la ternura y la inocencia...eran solo mi compañía...
retumba en mis oidos todavía esos gritos de alborozo, en el parque, en la calle, todos reiamos...
parecia la primicia de un carnaval...
pero tú...amigo mío... estabas ahi... parado sereno, pensativo y un poco taciturno...
pareciera que tus pensamientos y tu mirada se alejaba de este mi pueblo...
parecia tu mirada un adios irrenunciable... un adios inevitable...
yo te sonrei, franca y abiertamente, como yo solo lo se hacer... logrando arrancarte una leve y sutil sonrisa...
te miré fijamente a esos ojos color de selva...
penetrantes y oscuros ...
y sentí miedo de lo que ví...
era el presagio de tu partida... una mezcla de tristeza y desesperación... y desengaño...
te volví a sonreir y volvistes a mirarme...fijamente...
pero ya no sonreistes mas...
solo un adios quedo en el ambiente sin tú haber musitado una palabra...
sin tu haber emitido un gesto ni un sonido;
te diste media vuelta y te vi caminar seguro y lento... te mire hasta ver perderte entre las sombras,
y comprendí que te marchabas y que jamás regresarías... que solo en mis recuerdos te quedarías....
que mis lagrimas nunca mas volverias a ver, y que a mi tristeza no acompañarías...
la música, los pitos, el bullicio, mi gente, la pólvora me hicieron volver a la realidad,
solo alegría, se respiraba en el ambiente,
te busque en cada rostro, te busque en cada par de ojos, que se cruzaban en mi camino...
te busque en cada sombra, aun en la penumbra de esa noche...
sonaban los pitos de manera insistente, anunciando la llegada del un nuevo año,
los gritos ensordecedores... las luces como relampagos que se estrellan en el firmamento, por segundos enceguecian mis ojos... todo era alegría...
pero yo ...te buscaba amigo mío...
me escurri entre la multitud y camine solitaria...
por ese camino polvoriento, por ese sendero intransitable...
y te encontré ahí tendido en el suelo... inerte y frío...
no pude volver a ver tus ojos color de selva, que me hacian ver mis miedos, mis temores, y mis desamores...
no pude volver a ver en tu sonrisa leve y sutil...
aquellas tristezas sufridas, que recordaban, mis angustias... entonces comprendí que ya no te tendría más...
solo lágrimas bajaron de mi ojos... rodando sobre mis mejillas y callendo al vacio infinito del tiempo y luego sobre tu cuerpo...
te lloré amigo mío... como se llorá con el alma... te lloré entre la nostalgia y en la alegría...
porque tu pérdida era mi liberación...
Esperanza Ramos Yañez
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